Para comenzar, es importante saber como es el flujo de calor en un compresor de tornillo, esa máquina que en varios de los casos tenemos que mantener alejada de las oficinas y áreas transitadas debido a la cantidad de calor que arrojan y que hasta ahora en México no había sido aprovechado.
Durante la compresión y al convertir energía eléctrica en calórica, el compresor carga el aire que aspira con un potencial energético determinado. Esta energía corresponde aproximadamente al 25% de la energía eléctrica absorbida por el compresor. Esa energía no se aprovecha hasta que el aire comprimido llega al punto de consumo y el aire se relaja, robando al hacerlo energía térmica del aire que lo rodea.
Dependiendo de las pérdidas de presión y de la cota de fugas de cada sistema neumático, la cantidad de energía aprovechable en los puntos de consumo puede variar.